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Que dicen los santos sobre el Santo Rosario
Beato Alano de Rupe (1428-1475)
- Es una oración muy útil el rezo de ciento cincuenta Avemarías, a la Virgen es un obsequio que mucho agrada. Meditando la Vida, Pasión y Gloria de Jesucristo quienes las reciten. Porque el alma de tales oraciones esta meditación es.
Santa Teresa de Jesús (1515-1582)
- Para unirme con Dios he hallado en el Rosario los atractivos más poderosos, más dulces, eficaces y más suaves.
San Carlos Borromeo (1538-1584)
- Rezar mi Rosario es una verdadera alegría y mi más dulce ocupación, porque mientras lo rezo sé que estoy hablando con la más generosa y amable de las madres.
- A los sacerdotes: «mucho el rezo del santo Rosario les pido que recomienden en la confesión».
San José de Calasanz (1557-1648)
- El rezo del santo Rosario todos los días os dejo como mi testamento.
San Francisco de Sales (1567-1622)
- El mejor de los rezos es el Rosario.
San Luis María Grignon de Monfort (1673-1716)
- Para aliviar a las almas del Purgatorio el Rosario es unos de los medios más poderosos que tenemos.
- Para atraer sobre nosotros el Reino de Dios no encuentro otro medio más poderoso, la Sabiduría eterna, que unir a la oración vocal la oración mental, meditando sus misterios y rezando el Santo Rosario.
- Para conocer si una persona es de Dios no tengo mejor secreto, que sí el Avemaría y el Rosario le gusta rezar.
- Del Santo Rosario ¡Oh! ¡Qué maravilla de la gracia! ¡Del mundo poder escapar, de la carne, del demonio, y para el Cielo salvarte!
San Alfonso María de Ligorio (1696-1787)
- No conozco ninguno más agradable que el Rosario entre todos los homenajes que se deben a la Madre de Dios.
- Si aliviar a las benditas almas del purgatorio queremos, a la Santísima Virgen procuremos rogar por ellas, aplicando el Santo Rosario por ellas de modo especial que de gran alivio les servirá.
San Antonio María Claret (1807-1870)
- Quién no reza el Rosario por buen cristiano jamás será tenido.
San Juan Bosco (1815-1888)
- Toda mi obra educativa sobre la devoción de la Virgen y el rezo del Rosario se basa. Antes que al Rosario preferiría renunciar a cualquier otra cosa,.
- El Santo Rosario para la salud del alma es tan necesario como para el cuerpo es el pan, así lo es.
San Pío X (1835-1914)
- Que rece el Rosario dadme un ejército y con él conquistar el mundo lograré.
- La más bella de todas las oraciones el Rosario es la que más complace a la Santísima Virgen y la más rica en gracias.
- Si en vuestros corazones y en vuestros hogares deseáis paz, el Santo Rosario rezad diariamente.
Santa Bernadette Soubirous (1844-1879)
- Yo no hice estudios y soy muy ignorante, pero sé rezar mi Rosario, y con él logro comunicarme con nuestro Señor y con la Virgen Santísima.
- Si supieran lo generosa y buena que es nuestra Señora, amémosla mucho. Su Rosario recémosle con cariño y bajo su protección pongámonos y veremos qué conseguimos con ello grandes ventajas.
Santa Teresita del Niño Jesús (1873-1897)
- Todo se puede alcanzar con el Rosario. Es una larga cadena que une el cielo y la tierra según una graciosa comparación, uno de cuyos extremos en nuestras manos está y en las de la Santísima Virgen el otro.
- una larga cadena que une el cielo y la tierra según una graciosa comparación, uno de cuyos extremos en nuestras manos está y en las de la Santísima Virgen el otro. Dios no puede abandonar al mundo mientras el Rosario sea rezado, pues sobre su corazón esta oración es muy poderosa.
San Pío de Pietrelcina (1887-1968). Le llamaban «el Rosario Viviente»
- Cuántos rosarios rezaba cada día desde la mañana a la noche, al preguntarle respondió: “A veces cuarenta, otras veces cincuenta”. Y al preguntarle cómo hacía, respondía: “¿Y para no recitarlo cómo haces tú?».
- ¡Amen a la Virgen y háganla amar. El Rosario reciten siempre!
- Para poder redoblar los Rosario quisiera que los días 48 horas tuvieran.
Santa Teresa de los Andes (1900-1920)
- A la Santísima Virgen confíe todo. El Rosario récele siempre para que Ella le guarde no sólo su alma, sino sus asuntos también.
San Josemaría (1902-1975)
- En una de las devociones más arraigadas entre los cristianos fijaos, en el rezo del Santo Rosario. A la contemplación de los Misterios La Iglesia nos anima: para que se grabe en nuestra imaginación y en nuestra cabeza, con el gozo, el dolor y la gloria de Santa María, el ejemplo pasmoso del Señor, en sus treinta años de oscuridad, en sus tres años de predicación, en su Pasión afrentosa y en su gloriosa Resurrección.
- Con esta admirable devoción mariana, ojalá sepas y quieras tú sembrar en todo el mundo la paz y la alegría.
Santa Teresa de Calcuta (1910-1997)
- Cómo las hojas de la hiedra se aferran al árbol aférrate al Rosario; porque no podemos permanecer sin nuestra Señora.
- Sí, muy fieles tenemos que ser y de rezar el Rosario nunca dejar.
San Juan Pablo II (1920-2005)
- De las Avemarías del Rosario con el trasfondo, los episodios principales de la vida de Jesucristo pasan ante los ojos del alma. Nos pone los misterios del Rosario en comunión vital con Jesús a través del Corazón de su Madre.
- Es una oración apreciada por numerosos Santos el Rosario de la Virgen María y fomentada por el Magisterio. En este tercer milenio sigue siendo también una oración de gran significado, a producir frutos de santidad destinada.
- Es un verdadero compendio del Evangelio y conduce al corazón mismo del mensaje cristiano el Rosario, en su sencillez y profundidad
- El creyente obtiene abundantes gracias mediante el Rosario, como de las mismas manos de la Madre del Redentor recibiéndolas.
¿Qué dice la Virgen sobre el Rosario?
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¿Qué dicen los Papas sobre el Rosario?
Recitar el Rosario, en efecto, es en realidad contemplar con María el rostro de Cristo. (San Juan Pablo II) Han ...
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